Schirin en el jardín mágico

Junto a un arroyo cuya agua clara era más transparente que las lágrimas de una chica enamorada en su hora más feliz, Schirin se sentó en una piedra, de luto. El ciprés verde oscuro estiró su cabeza hacia el cielo. “Oh, piedra redentora”, dijo con un sollozo, “tú que has liberado a tantas pobres chicas de la enfermedad del amor y la miseria, escucha mi historia hoy”. Nadie nos escucha, y el arroyo es el testigo más fiel de mi sufrimiento: Érase una vez, el 13º día de la primavera, toda la gente del país dejó sus casas para pasar el día al aire libre, como dicta la vieja costumbre, recogiendo hierbas fragantes. Busqué sola la hierba del amor Krakuti. No pude encontrarla en ninguna parte.

Casi exhausta, escuché una mágica canción desde lejos, que se mezclaba con el murmullo de la corriente. Finalmente pude mojar mis manos calientes con el agua clara de diamantes. Cuando me lavé, vi junto a mi propio reflejo el rostro de un hermoso joven. Sus ojos se veían infinitamente tristes. Como estaba solo, no me atreví a dar la vuelta. Si lo hubiera hecho ahora, quizás lo habría visto antes de que desapareciera detrás del ciprés.

Así que jugué con su reflejo. El movimiento del agua cambió su expresión incontables veces. Sus ojos amorosos me miraban desde el agua, firme y tristemente. Si me hubiera atrevido a mirar alrededor, me habría ahorrado toda la agonía. Ahora es demasiado tarde para arrepentirme de mi vacilación”.

Schirin lloró y esperó la respuesta de la piedra.

Shirin y Khossrov, miniatura persa e ilustración de un cuento de hadas persa

De repente reinó la tranquilidad, el agua del arroyo se detuvo. Una voz profunda gritó sobre la piedra: “Shirin, serás liberada de tu dolor. El hombre que viste en el agua en este momento es el Príncipe Khossrow, que va de caza todos los años el día 15 de la primavera y espera aquí, junto a este arroyo, a una chica que lleva tu nombre y cuyo rostro vio en el arroyo. Ven mañana, en el día 13 de primavera, y tu destino se cumplirá”.

Texto e imagen: Akefeh Monchi-Zadeh

El cuento de hadas “Schirin en el jardín mágico” se publicó en 1956 en la revista cultural de la RDA “Das Magazin”.